El tendón de Aquiles es el tendón más grueso del cuerpo humano. Se puede palpar al final de la parte posterior del tobillo. Este tendón se compone de microfibrillas que permite la inserción de los músculos de la pantorrilla (gastrocnemio y sóleo). La Tendinitis del tendón de Aquiles llega a deportistas como a personas de mediana edad. Conoce todo lo relacionado con esta Tendinopatía en el siguiente artículo.
¿Qué es la Tendinitis Aquilea?
La Tendinitis Aquilea o Tendinitis de Aquiles es una lesión que causa dolor, irritación e inflamación del tendón grande en la parte posterior del tobillo (tendón de Aquiles). La tendinitis de Aquiles es una lesión común que tiende a ocurrir en atletas de alto rendimiento.
Esta afección también se denomina Tendinopatía de Aquiles, para describir el rango de síntomas que causan el dolor del tendón de Aquiles. Aunque el tendón de Aquiles es uno de los más largos y fuertes del cuerpo humano, puede requerir un tiempo prolongado para curarse.
¿Cuáles son los síntomas de la Tendinitis de Aquiles?
El principal síntoma que caracteriza la Tendinitis de Aquiles es el dolor detrás del talón, dolor que suele ser más destacado en un área de aproximadamente 2 a 4 centímetros por encima de donde el tendón se adhiere al talón. Otros síntomas característicos que podemos destacar en ésta lesión son los siguientes:
- El dolor por encima del talón puede durar varios días.
- Dolor en el tendón de Aquiles al comienzo de una sesión de ejercicio y disminuye a medida que avanza en el ejercicio.
- El dolor disminuye con el descanso, pero a menudo empeora por la mañana.
- El tendón de Aquiles es sensible al tacto cuando se presiona o aprieta en los lados.
- Puede haber nódulos o protuberancias en el tendón de Aquiles sobre el talón.
- El área sobre el tendón de Aquiles puede estar inflamada o engrosada.
¿Qué causa la Tendinitis Aquilea?
La causa más común de esta lesión es el sobreuso que genera estrés excesivo en el tendón de Aquiles. Otros factores también pueden contribuir al desarrollo de esta condición. La mayoría de los casos se deben a la degeneración de los tejidos, especialmente en adultos mayores o deportistas de avanzada edad cuya estructura fibrosa normal está dañada. Algunos factores causales que podemos destacar son:
- Tendones particularmente cortos, estrechos y rígidos.
- La falta de flexibilidad de los terneros debido, entre otros, al uso de zapatos de tacón alto.
- Una mala técnica al correr.
- Correr con zapatos usados o destinados a otro deporte.
- Deshidratación durante y después del ejercicio.
- Trastorno en la forma del arco (pies huecos o pies planos).
- Patología crónica del tendón como la enfermedad reumática.
- Falta de elasticidad.
¿Cómo se realiza el diagnóstico médico de Tendinitis de Aquiles?
Para diagnosticar la Tendinitis de Aquiles, su especialista realizará algunas preguntas para determinar el origen del dolor y la inflamación en el talón o la pantorrilla. Su especialista puede pedirle que se pare sobre las puntas de sus pies mientras observa su rango de movimiento y flexibilidad. También se realizará un examen físico en donde se palpará el área directamente para señalar dónde el dolor y la hinchazón son más severos.
Las pruebas de imagenologia pueden ayudar a confirmar la Tendinitis de Aquiles y determinar el estadio en que se encuentra la lesión, pero generalmente no es necesario. Las pruebas complementarias incluyen:
- Rayos X que proporcionan imágenes de huesos de pies y piernas.
- Imágenes por resonancia magnética, que pueden detectar roturas y procesos de degeneración tisular.
- Ecografía, que pueden el origen del daño e inflamación.